miércoles, febrero 16, 2011

Mudanza, mudanza... y más mudanza

Ayer leía en el periódico que los españoles tardamos cada vez más en independizarnos, concretamente la media se sitúa en 28 años para las mujeres y 30 para los hombres. Pues bien, parece ser que yo me voy a adelantar a esa media en un añito, puesto que mi chico y yo ya tenemos reservado piso y entramos a vivir en él en marzo. Ciertamente, cuando me imaginaba una mudanza me venía a la cabeza algo tremendamente laborioso, como bien puede serlo sacar todas las pertenencias de un sitio para ponerlas en otro. Aunque creo que todas mis expectativas se han quedado cortas. Y no sólo a nivel de agotamiento físico, sino también económico. En ambos casos se juntan aquellas compras que yo asumía como de "mera necesidad" cuando entras a vivir en un lugar nuevo, como cubiertos, sábanas, toallas, etc., amén de la comida; con el no poco trivial hecho de que la casa en cuestión tiene carencia de algunos utensilios básicos en la vida actual, como son microondas o colchón (que alguien me de una bala de paja, que hago un apaño, oigan). Todo esto hace que el total de las compras sumen una cifra de vértigo. Pero no sólo eso, no todo se arregla a golpe de talonario. Hay que tener en cuenta que también queremos tener una casa bonita, así que llevamos unos cuantos días visitando tiendas de decoración y rompiéndonos la cabeza pensando qué cosas pegan con qué otras (y teniendo en cuenta los muebles que hay), y una vez elegidos los candidatos, decantarse por uno. Simplemente agotador. Así que están a punto de saltarme los plomos. u_u